Efesios 4:8 Por lo cual dice: Subiendo a lo alto, llevó cautiva la cautividad, Y dio dones a los hombres.
I. INTRODUCCIÓN
Ya es de saber común que “don” proviene del griego (járisma) y quiere decir “un regalo, facultad milagrosa, una gracia especial, etc.”. Todo creyente que viene a Cristo debe tener por lo menos 1 don, porque Cristo reparte talentos conforme a la capacidad de cada uno (Mt. 25:14-15) “Porque el reino de los cielos es como un hombre que yéndose lejos, llamó a sus siervos y les entregó sus bienes. 15 A uno dio cinco talentos, y a otro dos, y a otro uno, a cada uno conforme a su capacidad”.
Como bien enseña la parábola de los talentos, estos dones deben ser trabajados y no escondidos, porque por ellos un día daremos cuenta el Señor de cómo usamos lo que él nos dio para trabajar en su obra. La parábola de los talentos es la fiel representación de como una persona incluso con dones se puede perder, pues aquel que decidió enterrar la gracia que Dios le dio Jesús le dijo (Mt. 25:26-30) “Respondiendo su señor, le dijo: Siervo malo y negligente, sabías que siego donde no sembré, y que recojo donde no esparcí. 27 Por tanto, debías haber dado mi dinero a los banqueros, y al venir yo, hubiera recibido lo que es mío con los intereses. 28 Quitadle, pues, el talento, y dadlo al que tiene diez talentos. 29 Porque al que tiene, le será dado, y tendrá más; y al que no tiene, aun lo que tiene le será quitado. 30 Y al siervo inútil echadle en las tinieblas de afuera; allí será el lloro y el crujir de dientes”.
El tener dones y el ser usado por Dios no es una garantía de la salvación, esto lo demuestra con todas sus luces (Mt. 7:21-23) “No todo el que me dice: Señor, Señor, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos. 22 Muchos me dirán en aquel día: Señor, Señor, ¿no profetizamos en tu nombre, y en tu nombre echamos fuera demonios, y en tu nombre hicimos muchos milagros? 23 Y entonces les declararé: Nunca os conocí; apartaos de mí, hacedores de maldad”.
Los dones son para la edificación de la iglesia, pero por ningún motivo deben tomarse como una garantía de la salvación, lo que comprueba nuestra salvación, o mejor dicho, la evidencia de que somos verdaderamente salvos, son los frutos y no los dones, el árbol no se conoce por sus dones, sino por sus frutos (Mt. 7:16-20) “Por sus frutos los conoceréis. ¿Acaso se recogen uvas de los espinos, o higos de los abrojos? 17 Así, todo buen árbol da buenos frutos, pero el árbol malo da frutos malos. 18 No puede el buen árbol dar malos frutos, ni el árbol malo dar frutos buenos. 19 Todo árbol que no da buen fruto, es cortado y echado en el fuego. 20 Así que, por sus frutos los conoceréis”.
II. CLAISIFICACIÓN DE LOS DONES
Existen varias clasificaciones sobre los dones. Ya en el pasado se han hecho varias listas de ellos, enumerando y enlistando y clasificando los dones. No existe una son la clasificación para los dones, ni tampoco todos creen que siguen vigentes, sin embargo pretendo ser lo más sencillo posible para que todos ustedes me puedan comprender en la clasificación de los dones que están disponibles para la iglesia.
Aunque sabemos que la Trinidad trabaja en unanimidad, también cada persona de la Trinidad cumple su papel en específico, por ejemplo, en la redención del hombre está envuelto toda la Trinidad, pero el Padre juega un rol el Hijo juega un rol y el Espíritu Santo juega otro rol.
En la redención del hombre:
1. el Padre ama y envía
2. el Hijo viene, muere y resucita
3. el Espíritu Santo convence y santifica
Del mismo modo los dones se puede identificar cómo los dones del Padre, los dones del Hijo, y los dones del Espíritu Santo.
Siempre se nos ha hablado de los 9 dones del espíritu, pero existen muchos más y pretendo enseñárselos ahora tratando o intentando clasificarlos en un orden lógico.
III. LOS DONES DEL ESPÍRITU
Partamos hablando de los 9 dones del espíritu que son los más conocidos para todos nosotros. Estos dones aparecen en (1° Cor. 12:8-10). Nosotros sabemos que estos son los dones del espíritu por lo que menciona Pablo en el versículo 7 y 8. Y estos dones se pueden clasificar en 3 grupos:
1. Dones de revelación (para saber):
a. Palabra de ciencia
b. Palabra de sabiduría
c. Discernimiento de espíritus
2. Dones de poder (para actuar):
a. Milagros
b. Fe
c. Sanidades
3. Dones de inspiración (para hablar):
a. Profecía
b. Géneros de lenguas
c. Interpretación de lenguas
IV. LOS DONES DEL HIJO
Cuando hablo de dones del Hijo nos referimos a los 5 ministerios del nuevo testamento, y sabemos que son dones del Hijo debido al contexto en (Efesios 4), desde el versículo 7 en adelante nosotros nos damos cuenta de que estos son regalos del Hijo.
Estos 5 dones serían:
1. Apóstoles
2. Profetas
3. Evangelistas
4. Pastores
5. Maestros.
La finalidad de estos 5 ministerios se encuentran en el versículo 12 “a fin de perfeccionar a los santos para la obra del ministerio, para la edificación del cuerpo de Cristo”.
Respecto a los primeros 2 ministerios, apóstoles y profetas, la mayoría concordamos en que esos ministerios sólo siguen vigentes por medio del fundamento que dejaron, “la doctrina apostólica y profética”, fueron llamados con el propósito de poner el fundamento (Ef. 2:20) “edificados sobre el fundamento de los apóstoles y profetas, siendo la principal piedra del ángulo Jesucristo mismo”.
V. LOS DONES DEL PADRE
Nuevamente, sabemos que se está refiriendo a dones del Padre debido al contexto que está hablando de Dios Padre en (romanos 12).
Aquí encontramos 6 dones:
1. Servicio
2. Enseñanza
3. Exhortar
4. Repartir o dar
5. Presidir o liderar
6. Hacer misericordia
Romanos 12:5-8 “así nosotros, siendo muchos, somos un cuerpo en Cristo, y todos miembros los unos de los otros. 6 De manera que, teniendo diferentes dones, según la gracia que nos es dada, si el de profecía, úsese conforme a la medida de la fe; 7 o si de servicio, en servir; o el que enseña, en la enseñanza; 8 el que exhorta, en la exhortación; el que reparte, con liberalidad; el que preside, con solicitud; el que hace misericordia, con alegría”.
VI. OTROS DONES
Los dones que estoy por nombrar no suelen estar dentro de los grandes grupos de dones, sin embargo, la biblia lo menciona como dones, por ende, no estarán exentos en nuestra lista:
a. los que ayudan (1° Cor. 12:28)
b. los que administran (1° Cor. 12:28)
c. el don de continencia (1°Cor. 7:7-9)
d. El don de hospedador (1° P. 4:9-10)
VII. CONCLUSIÓN
En la primera lista tenemos 9 dones. En la segunda lista tenemos 5 dones. En la tercera lista tenemos 6 dones. En la cuarta lista tenemos cuatro dones. Sumándolos por todos son 24.
POR PASTOR MARCELO FUENTEALBA
